Cualquiera podría pensar que practicar mindfulness o meditar es una tarea sencilla, la verdad es así. Practicar mindfulness o la meditación es sencillo siempre y cuando se cree un hábito de práctica, muchos expertos afirman que tan solo 5 minutos de ejercicios mindfulness o meditación en el día a día pueden marcar una gran diferencia en la experiencia de esta práctica. Hoy te platicaremos un poco de un ejercicio mindfulness sencillo y que necesita de poco tiempo para realizarse. Presta atención.
Aunque no seas consciente de ello, hay que reconocer que la mayor parte del día nos la pasamos juzgándonos a nosotros mismo y a la experiencia que resulta de relacionarnos con los demás. Siempre estamos pensando con prejuicios, con ansiedades futuras e incluso, con ataduras de un pasado que no nos suelta y gracias a esto es que no conseguimos disfrutar la vida plenamente.
Hoy queremos proponerte que te tomes un tiempo en tu día y te des a la tarea de traer estos pensamientos que te invaden y así, darte cuenta de todo lo que los envuelve. Es momento de que seas consciente y antes de querer cambiar tus problemas o encontrarles soluciones, es necesario te preguntes por el papel que juegas en ellos. Y para esto sirve este ejercicio mindfulness que hemos preparado para ti.
Primer paso, busca un espacio
Aunque el mindfulness puede llevarse a todos lados, para este ejercicio te recomendamos buscar un lugar tranquilo, de preferencia sin aparatos electrónicos y en el que puedas estar sin nadie. Este es un tiempo para ti.
Segundo paso, la posición perfecta
Ya que encuentres el lugar ideal es necesario que te coloques en una posición confortable, nosotros recomendamos la posición de loto ya que te permitirá estar cómodo para el ejercicio, además esta posición no es incómoda y ayuda a que tengamos la espalda recta, detalle muy importante al hacer nuestra respiración.
Tercer paso, frente al presente
Este ejercicio mindfulness tiene como objetivo devolvernos al presente, por ello intentaremos estar en el presente. Para ello cierra tus ojos y poco a poco concéntrate en tu respiración, date cuenta de la transición entre que inhalas y exhalas, siente cómo tu pecho o estómago se inflan. Presta atención al sentir de tu respiración cuando la fuerza del aire que expulsas toca tu pecho y comienza así, a darte cuenta de la vida en el presente, es decir, darse cuenta de la vida en tanto que sucede y se está en ella.
Cuarto paso, la visibilidad
Es momento de abrir tus ojos lentamente, observa lo que tengas en frente y fluye con los pensamientos que despierte lo que ves. No te quedes en ellos, solo deja que pasen como fluyen las olas, una tras otra. Después, observa tus manos, solo mueve tu cabeza, todo tu cuerpo mantenlo en la posición inicial y reconócete más allá del interior (en la respiración) en la exterioridad del cuerpo.
Quinto paso, enfrenta tus pensamientos
Probablemente ahora estás lleno de pensamientos, algunos debido a lo que observas, otros son ataduras al pasado y los últimas, seguramente son las ansiedades que te despierta la incertidumbre del futuro. Es momento, sea cual sea tu pensamiento, de traerlo por un momento y entonces, deberás preguntarte:
¿Cuál es el sentimiento que me afecta, me obstina y no me suelta? Debes reconocer cual es el sentimiento que te agobia, tal vez sea la tristeza, la angustia o el enojo, de cualquier manera, lo primero es reconocerlo
¿Por qué surge este sentimiento? Muchas veces no sabemos de dónde surgen nuestros pesares, comenzamos a sentir una angustia que crece y no se frena y no sabemos ni de dónde viene y esta pregunta intenta atacar esto. Lo que debemos hacer es ir armando un rompecabezas de sucesos que nos llevaron a este desenlace.
¿Es posible actuar? Antes de pensar en soluciones y en cómo echarlas a andar, es preferible saber de qué somos capaces en nuestra realidad vivida para poder así, pensar en cómo lograr una solución a nuestros problemas. Este paso nos brinda un cimiento para empezar a construir las respuestas que tanto queremos decirnos.
Este tipo de ejercicio es uno de los tantos que existen en el mindfulness con motivo de tener una conciencia plena. Nosotros te aconsejamos trabajar este ejercicio al menos 10 minutos al día, y no desesperar si en los primeros intentos no logras respuestas. Recuerda que se trata de constancia y de perseverancia.
También te gustará
-
NightBuds de Kokoon, los auriculares que ayudan a dormir mejor
-
¿Cómo decidirte a realizar ejercicio y formar hábitos saludables?
-
Un viaje por la mitología griega a través de los lugares más emblemáticos de Grecia.
-
Tenerife, un destino para deportes de aventura
-
7 Características de las personas tóxicas según Regina Carrot