¿No puedes dormir? 15 trucos fáciles para descansar cuando hace calor

¿Hay algo más frustrante que no poder dormir cuando las temperaturas son sofocantes? Un dormitorio caluroso es quizás el mayor enemigo del sueño, ya que la temperatura óptima para dormirse (y permanecer dormido) oscila entre los 16 y los 21ºC.

A medida que aumenta el calor, el tiempo que pasamos dando vueltas en la cama también tiende a aumentar, pero donde hay un problema, también hay una solución. Por eso, para esas noches en las que no hay absolutamente ninguna brisa, las ventanas están abiertas al máximo y no es físicamente posible quitarse más ropa, he aquí algunos consejos y trucos inteligentes que pueden ayudar a nuestros cuerpos (y mentes) a vencer el calor.

Considérelo su guía infalible sobre cómo dormir mejor cuando hace calor:

DO: ‘Coloca un pedazo de tela mojada y fría o con cubitos de hielo en una bolsa de plástico en las muñecas y el cuello, te sorprenderá cómo baja la temperatura de tu cuerpo’, dice Neil Robinson, que es un experto en temas de sueño para Sealy UK. Mantener los puntos de pulso fríos engaña a tu cerebro para que piense que te sientes fresca. O bien, sube la apuesta y congela una botella de agua para usarla en su lugar y aplicarla en todo el cuerpo.

DON’T: Mantener las ventanas abiertas todo el día pensando que así bajará la temperatura: en realidad, las habitaciones se mantienen más frescas durante el día cuando, tanto las ventanas como las cortinas, están cerradas.

DO: Nuestras extremidades (las manos y los pies) ayudan a regular la temperatura, por lo que enfriarlas reducirá la temperatura de todo el cuerpo: ‘Coloca una cubeta llena de agua fría junto a la cama y sumerge los pies en él antes y mientras te duermes’, dice Robinson.

DO: Dependiendo de lo comprometido que estés con la causa (o de lo privado de sueño que te sientas), meter la ropa de cama en el refrigerador o en el congelador durante 10 minutos antes de acostarte puede ofrecer un gran alivio del calor: ‘Si no tienes espacio en la nevera, enfría la funda de la almohada’, recomienda Robinson. El lado frío de la almohada será tu amigo.

DON’T: Comprar un ventilador barato. Cuanto más barato sea el ventilador, más probable es que lo oigas, lo que no favorece el sueño. El Purificador Cool de Dyson es una excelente opción, ya que es silencioso, enfría rápidamente la habitación y elimina el 99,5% de los contaminantes del aire, desde las bacterias y los alérgenos hasta el formaldehído de la alfombra y el suelo. Aire fresco y cuerpo fresco: dulces sueños.

DO: Invierte en ropa de cama de buena calidad con un alto contenido de algodón para asegurarte de que estás durmiendo en lo más fresco posible. ‘Las fibras naturales permiten que el aire se mueva libremente y circule por el tejido, lo que ayuda a mantenerte más fresco durante la noche’, dice Robinson. El lino es aún mejor, ya que es muy transpirable: prueba las sábanas de Piglet. La misma regla se aplica a la ropa de dormir: cuanto más algodón tenga tu pijama, mejor. Prueba el pijama corto Medina de Desmond & Dempsey.

DO: ‘Un truco sencillo es darse una ducha fría justo antes de acostarse’, dice Robinson, ya que reduce la temperatura corporal. Si las duchas heladas no te convencen (Kate Winslet es una fanática), prueba con el agua tibia, ya que igual bajará tu temperatura corporal.

DON’T: Beber alcohol. ‘Sólo te estás deshidratando antes de una larga noche de calor’, dice Robinson, quien recomienda beber un vaso de agua poco antes de acostarse, para evitar tener que levantarte durante la noche.

DO: Dormir solo: “No sólo nuestras parejas pueden molestarnos durante la noche, sino que el calor corporal extra también hace que sea más difícil conciliar el sueño”, dice Robinson, quien también señala que dormir solo significa que puedes estirarte, lo que ayuda a que el calor corporal se escape.

DO: Asegúrate de tener un colchón bueno, porque sobre lo que duermes es tan importante como lo que usas para dormir. ‘El colchón en el que duermes puede afectar a tu temperatura durante toda la noche. Busca colchones fabricados con fibras inteligentes como Purotex y Tencel, porque tienen grandes propiedades refrescantes’, dice Robinson. Echa un vistazo a los modelos de Sealy.

DON’T: Hacer ejercicio a última hora de la tarde. ‘Aumenta la temperatura central del cuerpo, lo que hace que dormir cuando hace calor sea mucho más difícil. Recomiendo optar por el ejercicio a primera hora de la mañana para poner en marcha el metabolismo y te ayuda a sentirte preparada para descansar por la noche’, aconseja Robinson.

DO: Comprueba la clasificación TOG de tu edredón. ¿No ha oído hablar de ello? La clasificación TOG indica la escala de calidez del edredón, y mientras que los edredones de invierno, que atrapan y mantienen el calor en los meses fríos, tienen una clasificación de 13,5 TOG plus, así que deberías buscar uno más bajo en verano. ‘Es importante tener diferentes edredones para ayudar al cuerpo a adaptarse a las diferentes estaciones’, dice Robinson.

DON’T: Dormir la siesta durante el día. Aunque el calor puede hacernos sentir vacíos de energía (porque nuestro cuerpo gasta más para regular la temperatura), esto puede dificultar el sueño por la noche.

DO: Tanto cuando no hace calor como cuando lo hace, asegúrate de mantener tus horarios normales para levantarte y acostarte: a menudo el calor nos hace quedarnos despiertos hasta más tarde, disfrutando de una o dos bebidas, pero esto puede causar estragos en la rutina de sueño de tu cuerpo.

Nota original: https://www.vogue.mx/articulo/dormir-y-descansar-cuando-hace-calor